FLYPPY, maestro vidriero
Escultor que combinan magistralmente hierro y vidrio para crear formas y bichos que nuestra imaginación difícilmente puede concebir.
«Es muy inmediato, no hay que esperar a que se seque, como la cerámica, ni necesitas un molde, como en el caso del bronce; aquí todo es más espontáneo y te permite improvisar».
Ismael Cerezo Ramírez, Flyppy (Murcia 1967), es un artesano que convierte en esculturas de vidrio y metal, las imágenes que pululan por su imaginación.
Su formación es prácticamente autodidacta. Empezó en los años 90 a realizar trabajos esculturas con diferentes metales y aprendió el oficio de vidriero durante 2 años (92 – 93) con el maestro Pere Ignasi en S`Hostalot, Mallorca.
Tras volver a Murcia, puso en marcha un taller con horno de vidrio en el que comenzó a crear sus propias piezas: lámparas, bichos de todo tipo como mariquitas, arañas, garzas, peces, toros, búhos, verjas, farolas y un sinfín de esculturas metal y vidrio.
Desde 1990, ha participado en más de un centenar de exposiciones tanto a nivel nacional (Murcia, Cartagena, Lorca, Caravaca de la Cruz, Madrid, Barcelona, Palma de Mallorca, Jaén, Alicante, entre otros), como internacional (Toulouse y Andorra).
¿Quiénes somos?
José David Alarcón «Pichi»
Luis Bodas
Luis Manuel Alemán Conejero
EL TALLER
Contemplar la obra de Flyppy es todo un ejercicio gimnástico para las neuronas; la yuxtaposición de los materiales y técnicas, el duro y tosco hierro y el frágil y transparente vidrio, el martillo sobre el metal y el aire insuflado al calor del horno.
En el taller de Flyppy, la pasta ardiente se convierte en insecto, éste en lámpara-luciérnaga. El hierro abraza al cristal, que se abandona a su caliente abrazo, y las chispas desprendidas al soldar pueblan el taller de este artista de color y movimiento.